De niña se colaba a escondidas al mítico Magic Circus de los noventa; hoy, Tricy es la Head PR detrás de algunos de los clubs y fiestas más vibrantes de la CDMX. Pero su trabajo va más allá de manejar listas: crea atmósferas, conecta personas y abre espacios seguros. Su talento innato para construir comunidad la ha convertido en una de las figuras más influyentes de la vida nocturna queer y underground de la ciudad.
El inicio de una vida nocturna
“Casual, sin buscarlo”, así describe Tricy su entrada oficial al mundo del PR. Fue Robin García quien la invitó a llevar su fiesta Disco Fetish. Y aunque al inicio dudó, pronto descubrió que tenía un talento natural para invitar, convocar y lograr que cada noche fuera una experiencia.
“Desde los 10 años me escapaba con mi primo a clubs. Ahí decidí que quería pertenecer a este mundo”, recuerda.
Los templos de la noche
Hoy, Tricy es anfitriona indiscutible en proyectos que ya son referentes en la CDMX:
• Sic – club queer icónico donde la libertad es regla.
• Vamos Abrazarnos – bar diverso y moderno.
• Mancusso – fiesta con más de una década de historia, fiel al house de Chicago y NY.
• Looloo – hotspot de electrónica internacional.
• Estéreo y Bonito – donde el pop, el electro pop y el reggaetón encienden la pista.
• Disco Fetish – su fiesta insignia, pura energía disco.
• Pride Together – celebración de música, comunidad y orgullo cada junio.
“Cada lugar tiene su esencia, pero todos comparten lo mismo: respeto, propuesta y magia”, asegura.
El secreto de un club exitoso
Para Tricy, la clave no está solo en el DJ o en la producción, sino en los detalles:
“El diablo está en los detalles. Desde la curaduría musical hasta cómo recibes al cliente. La gente busca sentirse a gusto, seguros, liberarse… si lo logran, regresarán cada fin de semana”.
¿Dónde salir? Los imperdibles según Tricy
• Si tienes 20 años y buscas tu primera gran noche: Bonito o Estéreo para pop, Looloo para electrónica, Janis para house o Montana para un mood variado.
• Si ya pasaste los 30 y quieres algo más curado sin perder el flow: Sic, Vamos Abrazarnos, El Ayer o Kinshasa.
Entre bambalinas
Aunque suene glamoroso, ser PR no es solo champaña y cabina VIP. “Te vuelves anfitriona, atiendes mensajes, confirmas listas, acompañas a tus invitados para que se sientan seguros. No se trata de números, se trata de relaciones humanas”.
Reinventar la noche
Para Tricy, las tendencias son cíclicas: todo regresa, pero lo importante es reinventarse constantemente. “El tiempo de vida de un cliente en la noche es corto. La gente crece, cambia, se casa… pero siempre habrá alguien nuevo esperando descubrir la fiesta”.
Por eso, mientras muchos ven la fiesta como un escape temporal, Tricy la asume como un estilo de vida. Su frase lo dice todo:
“Mi vida es una pista de baile.”
FOTOGRAFÍA @PABLOSOLANOPHOTO
MAKE UP & HAIR @CARLOSSOLARI
